BERISSO, Junio 28 (www.BerissoCiudad.com.ar) En diálogo con BerissoCiudad en Radio, la coordinadora del Centro Provincial de Atención de Adicciones (CPA), Noelia López, se refirió de manera amplia a la problemática en nuestra ciudad.

En principio, la coordinadora comenzó estableciendo su mirada respecto a la situación que tuve en vilo a Berisso en los últimos días.

“Por un lado es lamentable que muchas de las cuestiones que nos afectan a nivel general, pero desde lo local, por ahí tarden y que los que venimos trabajando hace tiempo un poco más silenciosamente en la atención de estas problemáticas nos parece que no siempre están en agenda. Entonces por un lado es triste que se den estos temas, por otro lado es bueno y necesario que se traten”, comenzó expresando.

Asimismo, indicó que hay muchas instituciones que vienen haciendo un trabajo serio y que es importante destacar el trabajo de las mismas, sin dejar de lado lo que falta y todo aquello que se puede potenciar o reforzar.

Siguiendo con el curso de la entrevista López remarcó que las cifras son alarmantes, con 200 consultas semanales: “es muchísimo y estamos desbordados. Intentamos poder procesarlas y darles una respuesta, pero sabemos que eso no alcanza y sabemos que las personas que llegan a una institución de salud son las menos. Somos conscientes de que queda súper corta la respuesta y el alcance”.

En este mismo contexto, la responsable del CPA aseguró que lo que se intenta hacer desde el Centro es generar el espacio de contención, acompañamiento y asistencia que se requiere, además de la atención de la salud.

“Hay un eje que acompaña todo el trabajo pero que nos excede que tiene que ver con el tema de la prevención. Ahí hay toda una discusión de qué es lo que necesitamos hacer o qué tipo de políticas necesitamos desde lo local en términos de prevención”, apuntó la entrevistada.

En cuanto a las condiciones en las que se acercan las personas a la institución a requerir ayuda, López dijo que “la mayoría de las personas llega con un consumo problemático, no necesariamente adicción, pero sí problemático. Es un concepto amplio que incrementa la responsabilidad de todos, porque por ahí una persona no generó una adicción propiamente dicha pero sí llega con dificultad para sostener un trabajo, con dificultades en vínculos comunitarios, más allá de la cuestión tóxica”.

E insistió en esto de que “no es la droga lo que mata a los pibes, sino el consumo en el contexto de todo un proceso de vulneración de derechos. Es decir muchas de estas situaciones llegan en el marco de situaciones de violencia de género en el caso de mujeres, de pibes que no tienen adultos referentes que los acompañen. Entonces es difícil el trabajo, y nosotros como equipo de salud podemos dar una respuesta, pero esa respuesta tiene que ser integral”.

En esta línea, la coordinadora ejemplificó la idea con la necesidad de un espacio de inserción: “hoy por hoy es difícil, sobre todo con el tema de los jóvenes. No tenemos acceso a programas, entonces me parece que es importante marcar la cuestión que tiene que haber espacios de asistencia pero también la red comunitaria y la respuesta institucional a nivel local, porque siempre es mejor prevenir que curar. Y en la atención debe ser intersectorial, porque siempre ponemos nuestra pata, pero tiene que ser en el marco de una respuesta más amplia. Sino queda corto lo que podemos hacer”.

También estableció que toda práctica de consumo es como resultado de algo: “por qué alguien consume, porque encuentra placer, porque se quiere anestesiar de algo u otras mil razones. Pero no es solo este eje el que hay que tener en cuenta, es una respuesta que se torna fallida porque genera daño y riesgos, pero no es sólo en el uno a uno. Por eso es importante el trabajo articulado y el pensar qué nos pasa como familia, como adultos”.

Y lanzó que “más que la droga es la hipocresía de nosotros lo que está matando a los pibes. Nosotros como instituciones de salud el eje es la contención, acompañar y no castigar, haciéndonos cargo de que nos falta un montón, pero por otro lado hay esferas que tiene que avanzar en cuestiones como sancionar a adultos que no cuidan a los pibes. La persona que consume necesita ayuda, no que la criminalicen, le hagan una causa y la detengan”, al tiempo que apuntó a la necesidad de luchar contra la comercialización de drogas, como herramienta para tratar la problemática.

Cabe destacar que entre otras características el CPA –de servicio gratuito- tiene la modalidad de atención ambulatoria. “Esto genera ciertas críticas porque por lo general la persona viene cuando la situación está estallada. Se acerca pidiendo por favor internación y eso genera todo un trabajo con la persona y la familia, porque para que sirva la internación hay un proceso”, dijo Noelia López.

La subsecretaría tiene becas de internación en comunidades terapéuticas propias y con convenios y es a través del CPA que se gestiona la posibilidad de becas necesarias.

También se cuenta con un equipo que trabaja específicamente intentando dar respuestas a aquellas personas que se acercan no por su cuenta, sino por un tercero.

En cuanto al impacto de las drogas en las clases sociales la responsable del Centro aseguró que “tenemos usuarios con distintas posibilidades, lo que sí el consumo es más problemático cuando hablamos de personas que vienen con trayectoria de vulneración de derechos previa. No es lo mismo trabajar sobre consumo con una persona que vive a la intemperie o no tiene un mango partido al medio. No podemos pedir que una persona trabaje en un grupo terapéutico cuando está teniendo hambre, eso hay que resolverlo primero o en paralelo”.

En este sentido compartió que están trabajando en el establecimiento de un centro de día y aprovechó para decirle a la comunidad  que “acercarse al CPA no es que te van a proponer que hagas terapia. La idea es acompañarte. Sabemos que hay gente que no quiere dejar de consumir, pero nosotros también le ofrecemos que se acerquen porque hay un consultorio de reducción de riesgos y daños, porque hay que saber cuidarse”.

Por otro lado este martes se lanza la capacitación docente sobre salud mental y adicciones y contará con la participación de cien docentes.

“También trabajamos con escuelas y clubes en un proyecto que está destinado a jóvenes y que busca trabajar el consumo problemático y hacemos eje en el alcohol, porque está en todos lados y muy ligado a otras prácticas de consumo”, compartió Noelia para luego destacar el rol de las instituciones además de informar que el número de consultas de mujeres fue en aumento.

Hay que agregar que desde la coordinación del CPA se solicitó gestión de políticas que se puedan aplicar concretamente.

“Este es el momento propicio, porque de todo esto puede salir algo superador. Poner todos los recursos que existen en la comunidad para empezar a articular con una directriz y esa directriz tiene que ser desde el gobierno local donde nosotros nos podamos sumar como Provincia, la ONG que viene haciendo un trabajo importante, SEDRONAR a nivel nacional. Por ahí podemos empezar a juntarnos y es importante no ser tan cada uno la estrella, sentarnos y ver qué tiene cada uno y articular para potenciar”, sostuvo López.

Y cerró con la posibilidad de Provincia de intervenir, asegurando que hubo encuentros con autoridades locales, también del hospital zonal: “participamos en el plenario de Región XI, donde a nivel ministerial estuvo la subsecretaria Patricia Segovia, quien planteó que este era un eje prioritario y nos convocó a trabajar articuladamente”. (www.BerissoCiudad.com.ar)