La delegada del Sindicato de Salud Pública en el Hospital Larraín, Norma Gómez, se refirió en diálogo con BerissoCiudad en Radio a la situación que atraviesa el sector de salud en cuanto a los reclamos de larga data respecto al pase a planta permanente de los trabajadores precarizados, entre otros inconvenientes.

“Seguimos con la mayoría de los compañeros en condiciones de becas de pre ingreso, no son personal de planta, no tienen salario, no tienen escolaridad, no les corresponde el salario universal ni aumento por bono porque al tener una beca y tener IOMA, por solo tener obra social no les corresponden un montón de cosas, no tienen antigüedad, hace tres años que están, pero no tienen antigüedad, no les corresponde jubilación y no les sirve”, comenzó detallando.

Con respecto a la persistencia de los reclamos en el tiempo, la entrevistada manifestó que “el año pasado fue duro. Fuimos y vinimos entre el Ministerio de Salud, la dirección intervenida, no había diálogo. Estuvimos muy mal con el doctor Coll que en principio fue una cosa y luego se portó muy mal con los trabajadores”.

En este sentido, precisó que “de golpe no nos atendía, había que pedir audiencia, no se podía subir a la dirección porque tenía llave. Vino un grupo del Ministerio que era agresivo, te trataba mal y teníamos esta onda de problemas y patoterismo. Fuimos llevándola tuvimos compañeros que en vez de permanecer en la lucha se pasaron de bando y tuvo consecuencias con lo que era la dirección del Hospital en ese momento”.

Con relación al vínculo con la dirección actual, Gómez dijo que “el año pasado muchísimas personas apostamos al cambio. Con la dirección tenemos un excelente diálogo con el doctor Zanaroni, todos los trabajadores. El doctor no mide ni mira si sos profesional o no, si sos de un sindicato o de otro. Nosotros somos todos agentes de la salud, con Zanaroni no tenemos problemas, no tenemos diálogo con los directores asociados, ellos tienen una postura donde su título, el ser médico los pone como profesionales y personal de servicio así lo sentimos. Después tenemos al doctor Zanaroni que termina solucionando las cosas, no nos podemos quejar”.

Y sobre esta misma línea, la delegada aseguró que “el hospital recuperó el diálogo, el compromiso. Hay que reconocer que los compañeros trabajan, tenemos un excelente equipo de enfermeros, mantenimiento, limpieza. El hospital funciona pero la gente quiere estar bien, cómoda”.

Asimismo, la referente sindical se pronunció en función del manejo que tienen como organización: “nos dijeron que este era un año de transición, de ayudar y comprometernos. Se trabajó, tuvimos problemas que se fueron solucionando, las cosas empezaron a aparecer, tuvimos la desgracia de que se prendió fuego el quirófano pero con esfuerzo y ayuda, con el trabajo de los chicos de mantenimiento que están en negro se sacó adelante el quirófano. Fueron los primeros que se metieron al incendio, los primeros en rasquetear. Y hoy vemos como se pierden los papeles adentro, que les falta este papel, los expedientes no salen. No queremos que vuelva a pasar lo mismo”.

De esta manera, aseveró que existe por un lado una buena voluntad mientras que por otro se sostiene la situación de alrededor de 90 trabajadores en condiciones laborales de precarización. “Hay de salud, de ATE, hay personal técnico que pertenece a la CICOOP. Te hablo de noventa trabajadores en negro”, se lamentó Gómez.

Mientras especificaba la postura de Zanaroni, afirmó que “el doctor ha ido a hablar al Ministerio varias veces y le prometen que vamos a pasar a planta. Hablan con uno con otro, lo mismo nos dijo el intendente (Nedela) que iban a pasar a planta porque iba a hablar con la gobernadora (Vidal) ya pasaron cuatro meses de ese día y no nos dio más entrevista”.

“Claro que él no tiene función porque el hospital es provincial pero quizás desde su lugar de jefe de la comuna él podía ayudarnos, pero hace meses que atrasan las reuniones. Nosotros pedíamos fuerza de todos lados, si no nos quedamos con  un director que va al Ministerio, el gremio de Salud, seguramente también otros, pero vemos que pasa el año y han hecho un sorteo de gente que va a entrar”, expuso.

Cabe agregar que de acuerdo a los datos informados por Norma Gómez, hay 1800 becas que se estructuran en 9 cuatrimestres “o sea 36 meses para que todo ese personal pase a planta pero ya llevan tres años precarizados, en Berisso 90. Y de 79 hospitales de la provincia fue el único que no tuvo un ingreso a planta permanente. Sí tuvo Ensenada porque entregó los papeles en tiempo y forma y Col no hacía caso cuando le pedíamos que lo haga”.

Hay que destacar que en la jornada del miércoles pasado los trabajadores realizaron un quite de colaboración como medida de protesta.

“Estamos con retención de tareas cada dos horas, en turnos porque son turnos de cuatro turno de seis horas. Quiero que sepa la población y trabajadores que no es que no queremos que el hospital funcione. Cuando un médico para no se deja de atender. De 8 a 10 de la mañana la gente que viene a sacarse sangre, con turnos programados es todo respetado. Funciona la guardia pero no hacemos tareas administrativas. La guardia funciona, todo  no abandonamos al paciente, solo es una forma de ver si realmente nos toca el sorteo y no tenemos que esperar tres años cuando fuimos campaña para las elecciones del intendente, de la gobernadora y seguimos esperando con màs de cien mil habitantes y un solo hospital que funciona”, cerró con firmeza Gómez.