Tras la extensión del período ordinario, el secretario del Concejo Deliberante, Rubén Sagarduy, anunció un nuevo comienzo que tendrá lugar el 1º de marzo e hizo un balance general sobre la labor del cuerpo deliberativo.

Si bien no hay vacaciones dentro del Concejo, en 2018 se hizo una excepción tras un pedido de prórroga, cambiando así la vieja agenda que culminó en esta ocasión el 30 de diciembre.

Lo mismo sucede este año, debido a una modificación que se promulgó la semana pasada en la antigua ley orgánica, la cual establecía el inicio para el 1º de abril. De esta manera, se definió que la fecha de inauguración de sesiones será el viernes 1º de marzo.

Con respecto al desempeño realizado, el secretario consideró que “fue un año de mucho trabajo pero con un balance positivo, porque como corolario del trabajo en general se logró un consenso a fin de año donde  Unidad Ciudadana nos planteó a nosotros determinadas cosas que les interesaba cambiar. Nosotros accedimos,  porque esa es la democracia, eso es plantarnos y decir lo que sirve y lo que no”. Y remarcó que “una oposición por oposición misma no sirve, ellos se plantaron muy bien”.

Además, en 2018 se culminó con la asamblea de mayores contribuyentes, que se aprobó prácticamente por unanimidad. La misma suerte corrió una serie de ordenanzas que actualmente  se está ejecutando.

Ahora, en vísperas de un período electoral y con un recorrido de 33 ciclos en el Concejo, Sagaduy considera que “siempre fue un año movido el año eleccionario, pero lo que noto es que el problema hoy lo tiene la oposición. Porque el oficialismo está unido, tiene claras sus metas”.

“La verdad es que todos son muy buena gente, son gente que conozco de todas las listas. Hay amigos en todas las listas. Pero la política es así, y a veces te lleva al querer ganar y al todo por el todo. Va a ser un año intenso y hasta luego de las PASO no se va a saber quién va a ser el nuevo contrincante que va a tener el intendente”, cerró.