En los últimos días se planteó un debate acerca de los posibles riesgos que corren los inspectores de Control Urbano mientras realizan sus tareas habituales; por este motivo, BerissoCiudad se acercó hasta las inmediaciones del Concejo Deliberante y dialogó con el secretario del área, Héctor Vechiatti, para que nos informe cómo es el trabajo que comprende el área.

Al respecto, el funcionario explicó que días atrás un inspector le comentó sobre una situación desagradable que había vivido en un comercio, la cual llevó a una discusión pero no pasó a mayores.

Esto es común y se da así debido a que la tarea “no es muy simpática porque hay que tener determinado perfil para ser inspector”, lo cual no sólo requiere de una capacitación para saber cuál es el conjunto de ordenanzas sino que hay que tener cierta determinación, “porque hay que tener en cuenta que uno se encuentra con situaciones chocantes”.

El inspector tiene que fiscalizar si la gente cumple con las normas vigentes, “entonces muchas veces vamos a lugares donde no se cumple con las mismas y la persona sabe que está en infracción y sabe que nuestra llegada es para llamarles la atención o aplicarles una sanción”.

“Ante la situación que estamos viviendo hay un cierto malestar general y muchas veces les cuesta pagar. Pero las normas las tenemos que hacer cumplir, porque hay comercios que sí lo hacen y compiten con los que no están habilitados”, recalcó.

Por estos motivos,  la tarea del inspector está reconocida en sus haberes y cuenta con una bonificación especial. Además, todas las cuestiones son planteadas dentro de la oficina, porque  son parte del cotidiano y permiten compartir las experiencias,  “algo que y a mí me sirve para ir guiándolos”, concluyó.