Indignada por la gestión del Municipio local con respecto a la entrega de alimentos, una vecina de Villa Nueva hizo pública su disconformidad y describió la situación que se vive en el barrio producto de “la necesidad de algunos” versus la “avivada de otros”.

“Me indigna ver como mienten diciendo que reparten mercadería en Berisso. En los colegios lo hicieron sólo una vez, el 23 de abril, y en esa oportunidad únicamente pude recibir un bolsón porque una de mis hijas no estaba en la lista”, comenzó diciendo la entrevistada, añadiendo de que es madre soltera de dos criaturas que necesitan de una asistencia urgente.

Sumado a ello, cuestionó el accionar de ciertos cooperativistas que asisten a los comedores de la zona a quienes aparentemente el Municipio les entrega comida, “porque los alimentos que dejan en ese lugar algunos los venden en los kioscos y rotiserías que tienen en sus domicilios”.

“La yerba la venden a 60 pesos, la cajita de dulce a 50, el puré de tomate 30, el azúcar a 60, la leche en polvo a 80, y así podríamos seguir con una lista de productos que ofrecen, a pesar que de los mismos tienen la etiqueta de 'prohibida su venta'”, recalcó.

Por estos motivos, “y si el Municipio realmente quiere ayudar, podría delegar la presencia de mayores controles en el barrio, para evitar la comercialización de los productos que deberían ser destinados a quienes realmente los necesitamos”.

“Aquellos que ya están favorecidos por los planes y cooperativas, es decir que tienen un ingreso, no tienen por qué vender el alimento que es para ayudar a quienes no tienen nada”, cerró.