Trascurrió un nuevo fin de semana en la ciudad de Berisso donde las playas, pese al tiempo inestable se convirtieron en un espacio elegido para la distracción y el descanso.

En este marco el portal de noticias BerissoCiudad dialogó con referentes de guardavidas que desarrollan una vez más la temporada en la costa local.

“Un finde de semana un tanto atípico en cuanto al clima, pero que no detuvo a la gente que disfruto de las playas de la ciudad” comenzó señalando Martín Idiart quien se desempeña en uno de los balnearios más concurridos con es La Balandra.

Asimismo recordó que como cada fin de semana “Hay controles en todos los accesos , donde se pide DNI y se constata si las personas son de la región, en ese caso pueden ingresar a los balnearios”, hay que agregar que priorizan a los vecinos berissenses y luego de otros puntos de la zona.

En el espacio abierto los visitantes tienen la obligación de respetar medidas de seguridad sanitarias: “Dentro de las playas las personas están manteniendo el distanciamiento social” aseveró el guardavidas.

Hay que recordar que el servicio de Guardavidas está desde el 15 de noviembre , todos los días de semana de 14 a 19 horas y fines de semana y feriados de 11 a 19 horas, hora en que se pide el desalojo de los vecinos presentes.

La seguridad en las playas este año fue un eje importante entendiendo la realidad actual.

“Además del servicio de Guardavidas están diversos agentes municipales como por ejemplo personal de Salud, Control Urbano, entre otros. También policía perteneciente al operativo sol y a la comuna” detalló la fuente.

Hasta el día de la fecha -en lo que va de temporada- se realizaron cientos de prevenciones de diversa complejidad por parte del equipo de Guardavidas y un dato a destacar fue que no se han registrado víctimas fatales por ahogamiento.

El municipio ha provisto de nuevos elementos de seguridad para los guardavidas -handies , binoculares y torpedos- e indumentaria -campera , remera y shorts- lo que colabora con la calidad del servicio de prevención.

En cuanto a intervenciones de prevención Idiart explicó que “la mayoría de los casos el río aparenta ser un lugar ameno y tranquilo, pero presenta complicaciones como canaletas profundas, crecientes repentinas, corrientes, por lo que la gente se confía, se adentra mucha distancia y luego tiene inconvenientes para regresar a la orilla”.

“En otros casos, los menos, aún con las advertencias de Guardavidas la gente no toma los recaudos necesarios y la prevención de convierte en intervención y rescate” añadió.

Y manifestó que los menores de edad solos, en zonas de agua profunda, son en general el problema más común. Pero destacó que “Se ve mucho menos cantidad de personas alcoholizadas en el agua, lo que refleja un mayor control integral por parte de los operativos de seguridad”.