Luego de la denuncia pública de una vecina de barrio Juan B Justo, en torno al robo que involucra a los medidores de gas, se sucedieron las repercusiones.

Es que este accionar delincuencial dejó sin servicio a decenas de vecinos. En este caso en particular, Natalia comentó que el hecho tuvo lugar el pasado lunes por la mañana y, debido a ello, tuvo que gastar 7 mil pesos para poder reponer la válvula y pagar al gasista matriculado.

A pesar de contar con todos los elementos, mencionó que “el mismo trabajador de Camuzzi fue quien nos dijo que debía llevarse el medidor para prevenir un futuro robo”.

Mientras esperan su regreso, los frentistas continúan sin poder calefaccionarse o cocinar en sus viviendas, y van pasando el día a día gracias a la colaboración de otras familias.

Como si eso fuera poco, describió que el lunes estuvieron toda la noche en vela “debido a los disparos que se escuchaban en todo el barrio”.

“Algo que se vive a diario en esta zona liberada, porque sea la hora que sea hay grandes y chicos circulando, pero nadie hace nada”, remarcó.

La seguridad, explicó, “está a cargo de los vecinos hacemos guardias para cuidar las casas y a los adultos mayores”.

“Todo está filmado, hicimos las denuncias correspondientes, y nos comunicamos con el intendente, pero todavía no nos respondió”, lamentó.

Por estos motivos, este martes por la noche llevarán adelante un cacerolazo desde sus viviendas, a las 21 horas, a fin de ser escuchados y llamar la atención de las fuerzas de seguridad.

Resta mencionar que la convocatoria está dirigida a todos los barrios.