Saladero Club Fútbol es una institución emblemática de nuestra ciudad. Alberga a cientos de chicos en sus diferentes categorías del fútbol infantil y en estos meses está atravesando una difícil problemática con su predio. Sobre este tema dialogamos con el presidente de la institución, Ariel Santillán.

La situación es que por la rotura de una manguera que atraviesa una parte de las instalaciones, se está inundando el predio, situación que imposibilita que se pueda utilizar.

“Nos está perjudicando, tenemos el predio inutilizable porque está inundado”, expresó el mandamás.

El reclamo se basa en que está situación “la venimos atravesando hace ya varios meses. Pedimos al municipio que actúe.

Luego aclaró que en un momento contaron con la participación del funcionario Aníbal Fernández, pero que no pudo hacer más que sólo intentar mediar.

A su vez, reveló que han tenido algún contacto con el municipio pero “hasta el momento con ninguna solución”.

Las mangueras que pasan por dentro del predio fueron colocadas por vecinos de la zona “de una manera no legal”, precisó Santillán y las respuestas a ese reclamo que viene de meses “"no es satisfactoria para nosotros” ya que “el agua se viene cada vez más y se inunda cada vez más”.

Ante esta situación, Santillán contó que como club “no le puedo dar las prestaciones que necesita cada categoría” y que “la realidad es esa, tenemos que subdividir”, y en ese sentido son espacios ilimitados que cuenta debido a no poder utilizar el predio de cancha 11 para los entrenamientos y que “teniendo el espacio no se les puede dar” a los chicos.

Lo que calificó como “algo injusto” pero que entiende toda la situación que se vivió en estos dos años por la pandemia, pero cree que “se le dio y se le está dando un tiempo considerable al municipio para que lo resuelva”.

El inicio de la problemática se dio tras el ingreso de caballos que “entraron al predio a pastar y rompieron las cañerías” y “los vecinos no las arreglan”, mientras que ellos no lo pueden sacar ya que “no queremos tener conflictos con los vecinos por sacar la manguera”.

“El municipio les tiene que dar las prestaciones por dónde corresponde y no por dentro del predio”, enfatizó, para luego dar cuenta que él como dirigente tiene que “dar respuesta” ante los enojos de los entrenadores y papás de los chicos. “Necesitamos una respuesta”, reiteró.

Para cerrar, el presidente manifestó que esto arrancó por el mes de febrero y se dirigió desde ese entonces a las “áreas correspondientes”.

“Presenté notas, he hecho todos los pasitos que había que hacer” pero “la solución nunca llega”, cerró.