Sin dudas, la Dirección de Mujer, Género y Diversidad es una de las áreas municipales dónde la demanda y la responsabilidad están a la orden del día.

Con un total de 35 denuncias inició una nueva dirección a cargo de Marina Peñalva, quién brindó detalles de los cambios y proyectos que estarán sujetos a la orden de Provincia.

De esta manera, explicó que así como se jerarquizó el área desde el Ministerio de la Mujer Género y Diversidad y luego se elevó a dirección, a partir de ahora se va a trabajar la cuestión de la violencia de género, la prevención y el cumplimiento de la Ley Micaela García.

En relación a este último ítem, comentó que ya están en comunicación con el padre de Micaela para establecer vínculos y cooperación mutua.

Pero la idea será trabajar con la prevención y la difusión y “que lo urgente no tape lo importante, porque estamos atravesados por una sociedad patriarcal donde se dan diversos tipos de cuestiones que no sólo tienen que ver con la violencia física”.

Puntualizando en la situación de Berisso, Peñalva expuso que en diciembre de 2019 se instalaron más de 35 alarmas, “eso significa que son 35 mujeres que llegaron a hacer la denuncia y se les labró un oficio para que se instale el botón, pero a todas aquellas que no visibilizaron la problemática no las podemos contabilizar, y seguramente sean muchas más”.

Por ello, darle continuidad al tema es una prioridad al igual que la prevención. Tal es así que a partir del día de la fecha, se puso a disposición un dispositivo que es para trabajar con las mujeres que fueron atravesadas por violencia, dentro de un grupo de reflexión y empoderamiento.

En su experiencia como psicóloga, psicopedagoga, Peñalva participó en equipos de orientación escolar y de atención primaria, algo que según su opinión la llevó a percibir un cambio de mirada en la sociedad, pero consideró que aún cuesta “muchísimo”.

Gracias a la exposición, “aparecen muchos más casos que en otros tiempos, porque antes era un tema que sucedía en todos los organismos y hasta que no uno no empezaba a indagar no salía porque estaba naturalizado”.

“Desde que se empezó a cuestionar las mujeres pudieron empezar a hacer algo, pero falta mucho recorrido y la atención primaria es un lugar donde se puede comenzar a trabajar”, concluyó.