Los abajo firmantes, miembros del personal que desempeña tareas en el exInstituto Médico Argentino (IMA) de esta ciudad, hoy Cooperativa Instituto Médico Argentino de Berisso Limitada, tienen el agrado de dirigirse a usted con relación a la nota aparecida en su publicación digital de fecha 23 del corriente mes y año titulada “Temor por despidos masivos en el IMA de Berisso- el maltrato, moneda corriente”, a efectos de hacerle llegar, por este medio, nuestro punto de vista sobre las cuestiones que en dicha publicación se ventilan.
En primer término resulta necesario aclarar que este establecimiento asistencial oportunamente ha adoptado la forma jurídica de “Cooperativa de trabajo”, habiendo obtenido el pertinente reconocimiento como tal por parte de las autoridades administrativas provinciales competentes bajo el Registro Provincial Nro. 015548, otorgado por la Secretaría de Participación Ciudadana, Subsecretaria de Acción Cooperativa.
Como seguramente resulta ser de su conocimiento, y del resto de la comunidad, la decisión de organizarnos bajo la figura de Cooperativa fue adoptada, libre y voluntariamente, por la inmensa mayoría de los trabajadores ante la encrucijada que planteaba el cierre de nuestra fuente de trabajo como consecuencia de la ruinosa gestión desplegada por sus anteriores propietarios, quienes llevaron al establecimiento al borde de la quiebra creando artificialmente y acrecentando un pasivo imposible de afrontar.
Fue por ello, que como bien se consigna en vuestra publicación, cuando el dueño del entonces Sanatorio Argentino estaba a punto de presentar la quiebra generando despidos masivos del personal, fue el propio doctor De Rosa, actual director médico del establecimiento quien se hizo cargo del mismo asumiendo el pago de los trabajadores y evitando de esa forma que más de 80 familias quedaran en la calle ante el inminente desaparición de su fuente de trabajo.
En la actualidad este establecimiento brinda asistencia médica a 50 mil pacientes al año, ya sea mediante internaciones o atención a través de consultorios externos ofreciendo todas las especialidades, y habiéndose convertido en un pilar de la salud para la seguridad social en nuestra comunidad.
Por supuesto que dichas prestaciones se llevan a cabo en un verdadero clima de armonía y cooperación laboral y se realizan con la más extrema dedicación y voluntad puesta de manifiesto por todo el personal interviniente, ya sea médico o auxiliar, directivo o simple trabajador, salvo escasísimas y muy cuestionables excepciones que movilizadas por intereses ajenos al común retacean su colaboración planteando conflictos y desavenencias inexistentes en pos de un supuesto interés gremial contrario al común interés de esta institución y de los hombres y mujeres que día a día ofrecemos nuestro esfuerzo en beneficio propio y de la comunidad en su conjunto.
Es por ello que de la forma más enfatica y contundente rechazamos las falsas alegaciones de maltrato respecto del personal al igual que aquellas que indican que nuestros derechos laborales hayan sido sistemática y metódicamente vulnerados.
De igual manera queremos dejar expresada nuestra más profunda solidaridad frente al agravio que gratuita e injustamente la publicación en cuestión irroga al doctor De Rosa y a nuestra jefa de Enfermería y encargada del personal de limpieza, Blanca Márquez.
Es en virtud de ello y a sabiendas del espíritu de justicia y ecuanimidad que siempre ha caracterizado a esa prestigiosa publicación que solicitamos tenga a bien dar a la presente la difusión pertinente.
Sin otro particular saludamos a Ud. muy atentamente.
Trabajadores de la Cooperativa Instituto Médico Argentino
