Voluntariado social

Comunidad Malú: familias voluntarias abren las puertas de su hogar

Una segunda oportunidad.
Una segunda oportunidad.

En BerissoCiudad en Radio dialogamos con Victoria Ibarra, referente de Comunidad Malú, una asociación civil sin fines de lucro dedicada al voluntariado social en hogares convivenciales

En referencia al término "Malú", contó que viene del hawaiano y que significa "abrazo, abrigo, paz", y sobre la tarea mencionó que su programa principal es "familia que abrigan", que llevan más de cinco años trabajando

Respecto al programa explicó: "Niños a los que se les hayan vulnerado sus derechos y que Estado decidió que tengan que salir de su núcleo familiar, nosotros les ofrecemos en vez de que vayan a un hogar tradicional vayan a una familia y tengan la posibilidad de crecer en un entorno familiar".

"Familias que abrigan" se da gracias a un convenio firmado con el Organismo de Niñez y Adolescencia de la provincia de Buenos Aires. “Convocamos familias para poder tener habilitadas” para cuando “el juez dicte la medida de abrigo, ahí el organismo nos solicita una vacante para cuidar a ese niño”, precisó.

Y desde ese entonces se trabaja de manera articulada con los organismos, "porque brindamos información y siempre cumpliendo todas las disposiciones que se nos van pidiendo". Desde el seguimiento al niño hasta la posibilidad de volver a regresar con su familia.

Ante la problemática del recorte de los servicios locales del Carmen, y la importancia de ese dispositivo, Victoria manifestó: "Los servicios locales son importantísimos", pues "son el primer eslabón de la cadena" ya que detectan los casos de aquellos niños que tienen sus derechos vulnerados.

"Los servicios locales cumplen un rol fundamental, muchas veces hacen un trabajo enorme que trascienden de los recursos que tienen", insistió.

Dentro de esa cadena, que trabajan para poder estar sobre los niños, valoró "a las familias que se ofrecen" por "involucrarse emocionalmente y sentir esto como una muestra de amor", ante lo cual sentenció: "Son familias para admirar".

Al aludir a ese funcionamiento que tienen las Familias de Abrigo, reconoció que "al principio vienen con miedo", pero luego "les damos las herramientas necesarias para que se sientan fuertes, le explicamos el marco legal" y eso hace que "vayan viviendo el proceso con su tiempo".

Ibarra sostuvo que a través del convenio, el organismo provincial les da "una beca por niño para poder solventar los gastos", a lo que dejó en claro que no es suficiente, es por eso que en todo momento. "Nosotros estamos súper presentes", finalizó Victoria.

Para ser familias de abrigo o socios pueden entrar a la página web https://comunidadmalu.org.ar/ e informarse un poco más sobre la comunidad.

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