Luego de la convocatoria llevada a cabo en las puertas del Hospital de Berisso, la enfermera Lorena Toledo, habló de los pormenores que desencadenaron en dicho accionar. El nulo apoyo de los gremios para revertir su situación económica fue el eje de la conversación

La disconformidad, explicó, se dio por el aumento salarial en otros sectores como lo es el de los bancarios, “con un 45 por ciento y un bono de 100 mil pesos”.

“Estamos muy disconformes porque los representantes de los distintos gremios, que tendrían que velar por nuestro trabajo, arreglan porcentajes bajísimos en las paritarias que no nos permiten un sueldo digno”, indicó, lo cual “no nos deja cubrir siquiera la canasta familiar”.

Y anexó: “14 mil pesos, es lo que cobramos la mayoría de los trabajadores del Hospital”, por lo que “más del 80 por ciento trabaja todo el día, en dos o más instituciones para poder solventar la economía familiar”.

Como esenciales “no podemos dejar de atender pacientes, pero de alguna forma tenemos que buscar la forma de que la sociedad nos apoye. Por eso, es muy probable que a futuro hagamos medidas de fuerza para que nuestro reclamo se sienta”, agregó.

“Queremos que la ciudad de Berisso se entere cuál es la realidad de los enfermeros y de todos los trabajadores de la salud” porque “hace más de 500 días no tenemos descanso, que se nos suspendieron las vacaciones”, exclamó.

El no pago del bono, también fue otra de las aristas que generó disconformidad en el sector, “y no puede ser que quienes estamos en el frente de batalla, expuestos como estamos, vivamos bajo la línea de pobreza”.

Algo que no coincide con el “rol protagónico que están teniendo los enfermeros, que nos capacitamos contablemente par estar a la altura de las circunstancias”.

Por eso, consideró que la enfermería debería tener un lugar dentro de las decisiones que se toman en el nosocomio, “que aún no lo tiene”.

Por otro lado, mencionó que para lograr una mejor atención se necesita más personal, “porque por casa médico debería haber cuatro enfermeros, y hoy se llega a 1.5”.

“Hay aparatología, insumos, pero lo que falta es recurso humano” y “si bien se abrieron tecnicaturas, la gente no se vuelca a estudiar enfermería porque sabe de la precarización”, prosiguió Toledo.

Más allá de todo, expresó su orgullo de pertenecer al Larraín “donde estamos bien. Por eso, lo único que falta es mejorar lo salarial y la sobrecarga laboral”.

Las acciones a seguir se definirán en los próximos días junto a los colegas de La Plata y de toda la Nación, marcado “que estamos en pie y estamos en lucha”.