En Berisso se encendió el alerta por la cantidad de suicidios que se vienen dando de forma continua, con jóvenes de distintos barrios que toman esta drástica e irreparable decisión.
A lo largo del año supimos replicar a través de este medio una serie de noticias vinculadas a este flagelo. Pero sin retroceder en el tiempo las últimas cifras que se dan en nuestro distrito ameritan un análisis.
Dos casos en una semana. Uno de ellos con un joven de 25 años que se dio un disparo en la cabeza y días después falleció en el Hospital Larraín.
El otro hecho tuvo lugar el pasado domingo 5 de noviembre, con una persona de 27 años que se colgó en una vivienda de calle Carlos Gardel.
Si bien la multiplicidad de factores es una de las características del suicido, la ecuación los lleva a una serie de preguntas tales como: ¿Existen herramientas en Berisso para abordarlo? ¿Los vecinos o familiares se acercan a los distintos organismos de salud para consultar a los profesionales? ¿Existen medidas para prevenir la problemática?
En este sentido, es importante mencionar que dentro del área sanitaria de la Municipalidad de Berisso se supo jerarquizar el espacio de Salud Mental a través de una jefatura. Por ende, sería interesante saber acerca del abordaje y propuestas que de allí surgen para dar una respuesta a esta problemática que afecta a los berissenses.
También, sería más que significativo el pase de información de parte del sector de seguridad, para dar a conocer este tipo de hechos, dando cuenta de que el problema existe y se necesita un plan de acción.