BERISSO, Noviembre 8,.(BerissoCiudad.com.ar) Perdió en Berisso ante El Porvenir, de la C, el mismo equipo que lo había eliminado en la edición anterior
La incursión de Villa San Carlos en la IV edición de la Copa Argentina le duró muy poco. Porque perdió ayer ante El Porvenir por 2-0, en el Genasio Sálice, y se despidió de la competencia rápidamente, como sucedió el año pasado, cuando el mismo rival lo eliminó en el primer partido del certamen federal.
El conjunto de Berisso, que salió a la cancha con un equipo conformado en su mayoría por los habituales titulares, jugó quizás el peor partido de la temporada, lo que resignó toda posibilidad de seguir en carrera.
El Porvenir, que milita en la Primera C, hizo todo lo contrario. Jugó como lo había planeado, y con un Gustavo Fernández inspirado (fue autor de los dos goles), selló el resultado en favor de los de Gerli, que es dirigido técnicamente por el periodista de espectáculos Luis Ventura y por el Loco Carlos Enrique, un conocido de la gente de San Carlos.
MUY POCO
Bajo un calor sofocante, los dos equipos salieron a disputar un primer tiempo que quedará en el olvido. La Villa, que no fue aquel equipo sincronizado que viene haciendo una gran campaña en el torneo de Primera B, se mostró impreciso en todas sus líneas y sin explosión en los metros finales.
El trabajo de Ignacio Oroná, quizás, fue el más destacado de un equipo que tuvo puntos muy bajos en lo individual.
El Porvenir, con el trabajo criterioso de los volantes y con un Gustavo Fernández letal, le alcanzó para manejar el partido y para demostrarle a la Villa que estaba en condiciones de darle una sorpresa.
Y no falló. A los 20 minutos, salió un pelotazo largo que Javier Menghini falló en el rechazo, y Fernández, apareciendo por detrás de éste, controló y “fusiló” a Coloca.
La Villa insinuó alguna reacción, pero seguía lejos de ser ese equipo ordenado y punzante. Muy solos arriba Vegetti y Sarati, y sin un patrón de juego en la mitad de la cancha.
DE CONTRAGOLPE
En el arranque del complemento, Rezza movió el banco, e hizo ingresar a Rancez y Troncoso, con la idea de darle mayor peso ofensivo al ataque.
Y a los 30 segundos, un cabezazo de Martín Troncoso dio en el travesaño, en la jugada más clara de peligro.
Dio la sensación de que la Villa iba a reaccionar, pero no fue así. Atacó a los ponchazos, aunque tuvo algunas chances para alcanzar el empate. Sin embargo, El Porvenir, que apostó al contraataque, le bajó la persiana al partido con otra aparición fulminante de su figura, Gustavo Fernández, quien resolvió con categoría, a los 21, después de un centro de Chávez.(Fuente: EL DIA)