Salud

“Debemos cuidarnos para que no estalle el sistema porque estamos cerca de una respuesta”

La palabra de la infectóloga Gabriela Piovano.
La palabra de la infectóloga Gabriela Piovano.

La infectóloga del Hospital Muñiz de la Ciudad de Buenos Aires, Gabriela Piovano, brindó detalles sobre el sistema de salud vigente y las propuestas vinculadas al desarrollo de las vacunas para contrarrestar el COVID-19.

En diálogo con BerissoCiudad, destacó la importancia de mantener una política sanitaria en los hospitales que son los espacios que dan contención, principalmente, de la mano de salud pública, a pesar de los intentos de privatización que decayeron gracias al ingreso de este nuevo Gobierno; intentos que tuvieron como lógica empobrecer el sistema, “cuando somos los públicos los que tenemos la capacidad de dar respuesta”.

Más allá del contexto actual, cabe recordar que “venimos de la pandemia más importante que tuvo lugar el siglo pasado, el HIV, lo cual significó un cambio para toda la humanidad con la visibilización de las minorías, pero después nos tocó el hantavirus, el dengue y el H1N1”.

De hecho, “el año pasado hubo 32 muertes asociadas a gripes y neumonías. Pero lo cierto fue que todos los años no moría esa cantidad de gente, porque cuando se va el Gobierno de Cristina Fernández teníamos 16 vacunas, entre ellas aquellas que prevenían dichas enfermedades”, recordó.

“El rebrote del H1N1 en 2019 fue una realidad de la cual no se habló y el sistema en ese período tuvo colapsos, sobre todo en el interior de la Provincia”, recalcó. Asimismo, puso de relieve que “nosotros también notamos que no hubo vacunación; algo que quedó más que claro en el momento que encontramos las vacunas que no se dieron debido al accionar de los cómplices genocidas”.

“Acá el problema no es la plata, sino las personas que no quieren a la gente que no pertenece a su casta. Y esta pandemia nos da la oportunidad para que muchos que apostaron al individualismo se sientan vulnerados y cambien su actitud”, reflexionó.

¿Qué sucede con los insumos, hay faltantes?

“Particularmente en el Hospital Muñiz no tenemos problemas de insumos para el personal, porque exigimos que estén”, aclaró la profesional, para luego dar cuenta que “en el ámbito privado los recursos que baja el Estado central para llegar a los efectores finales depende de la decisión política de cada distrito”.

También se puso información en relieve y al alcance de los profesionales para saber cómo se tiene que trabajar con esto, “pero en muchos lugares no se hizo nada y, además, hubo mucha limitación con el personal de salud, porque no se puede inventar un profesional de un día para el otro”.

“Paralelamente hubo un desafío político, porque si sos sensato te fijás lo que le pasó a otro en la misma situación. En medio de todo esto, el personal de salud viene vapuleado desde hace muchos años, con el agravante de que no tiene la capacidad de negociar, lo que lleva a tener menos remuneración y por ende menor calidad para los pacientes”, argumentó. “Cuando todo empieza a estallar es culpa del personal de salud o del infectólogo, y no del político que tomó la decisión”, exclamó.

¿Qué sucede con la vacuna y su producción?

“La vacuna sería la prevención. Pero lo primero que no tenemos que ser es ingenuos, porque la partida política se está jugando con la vacuna. Tampoco tenemos que ser pelotudos y enarbolarnos en el antivacunismo, porque si la humanidad llegó hasta acá en gran parte fue por la vacuna”, remarcó.

Planteó en ese sentido que tal actitud configura “un antirespeto total que hay que repudiar, porque han muerto chicos por sarampión debido a que sus padres se compraron esa mentira”.

Ante esto, “hay que ver quién nos habla y desde dónde nos habla, porque si hay algo que se hizo fue invisibilizar nuestros intereses. Entonces, el análisis sobre esto tiene que ser distante, mirando los actores y los resultados, y lo que nos tiene que interesar es que hay varios proyectos, no estamos viendo una sola cosa”, planteó.

“Tenemos la suerte de contar con un Ministerio y una política pública que se interesa por ello. Por eso, debemos cuidarnos para que no estalle el sistema porque estamos cerca de una respuesta, y para fines de diciembre vamos a tener conclusiones”, anticipó, ya que “se han puesto en marcha un montón de recursos a nivel mundial, más allá de lo intereses económicos, y el desafío es seguir sosteniendo lo que tenemos y que nos dio la pauta de que sirve mientras lo sigamos haciendo”.

“Lo que estamos haciendo no es un sinsentido, pero que si tiramos la toalla muchos seres queridos no podrán llegar a verlo. Esta una gran oportunidad para revisar lo que estuvimos haciendo, y para no permitir que nos quieran imponer los valores que nos han destruido. Se trata de salir con conciencia colectiva, a través de un apocalipsis que nos llevará a una nueva forma de pensar”, concluyó.

Comentarios