Tal como se había anunciado, este miércoles 22 de septiembre, trabajadores y delegados del Sindicato de Trabajadores Municipales de Berisso llevaron adelante una movilización con el objetivo de visibilizar la problemática de la paritaria estancada.

Luego de reunirse en el Playón Municipal, los manifestantes se dirigieron al Concejo Deliberante a fin de presentar una nota a los concejales de los distintos bloques para obtener el apoyo parlamentario.

Allí fueron recibidos por la concejal de Juntos, Silvina Di Renta, y la concejal del Frente de Todos, Miriam ‘Pelusa’ Larrañaga.

Ambas recibieron el escrito de la mano del secretario general del STMB, Jorge Rodríguez, y prometieron ponerse a entera disposición de los trabajadores.

Paso seguido, continuaron el recorrido por Avenida Montevideo y cortaron la Génova, estableciéndose en el Puente Tres de Abril, donde surgió un suceso inesperado que dejó a todos desorbitados cuando el intendente en persona se acercó a la manifestación.

Pero, lejos de establecer una charla, el jefe comunal caminó entre la gente sin dar respuestas ante la demanda, continuando su camino al Concejo Deliberante para llevar documentos que, según él, “son parte de la labor diaria”.

Esto, sin dudas, recrudeció el enojo de los allí presentes que emprendieron la marcha a las puertas del Palacio Municipal a la espera de su regreso que, nunca sucedió, a pesar de que el jefe de Gabinete, Ramiro Crilchuck, les pidió que esperen.

Llegando así al mediodía, volvieron al Puente Tres de Abril para cortar la Avenida Montevideo a la espera del intendente, quien -efectivamente- a la media hora pasó por allí, pero evitó reunirse con los manifestantes, “por no ser este un ámbito para discusiones serías”.

Así las cosas, con un clima de tensión y disgusto, los municipales anunciaron que el paro seguirá vigente hasta tanto no se revierta la situación y negatividad de llegar a un acuerdo de paritarias.