Marisa, vecina de la ciudad de Berisso y madre de un joven de 15 años, dirigió a este medio la denuncia pública contra el accionar policial.

La vecina se encontraba realizando actividad en la zona de la pista Olmi Filgueira cuando al retirarse vio patrulleros que tenían contra la pared del Jardín 901 a un grupo reducido de menores.

“Me llamó la atención, pregunté a una chica por qué los habían agarrado y la chica dijo que no estaban haciendo nada. Yo pensé ‘si llegan a tener a mi hijo así no lo voy a permitir’. En ese momento, mi hija que advierte que era mi hijo a quien tenían tirado en el piso”, comenzó relatando Marisa.

Según cuenta la madre, que además fue testigo de lo sucedido con su hijo, habían tirado las pertenencias que el joven de 15 años llevaba en su mochila.

“Cuando me acerco estaban revisándole las cosas, esperé a ver qué encontraban y no encontraron nada. Ahí les comunico que soy la mamá y que me lo quiero llevar”, amplió la mujer que por lo que expone recibió una negativa por parte de los uniformados.

“Me dijeron que no podía ir con prepotencia y yo les comenté que no podían requisar a un menor, no pueden pedir el documento porque esa época ya pasó. Yo estaba muy nerviosa porque estaban haciendo cosas que no corresponden”, indicó.

En ese momento se acercaron varios vecinos y “les dijeron que no podían retener al nene y que como mamá tengo autoridad de llevármelo. No me lo querían dar y me amenazaron porque no me lo querían dar”.

Para cerrar, precisó: “veníamos caminando por la Montevideo y nos dimos cuenta que el patrullero nos siguió cuatro cuadras”.

“Mi hijo no va a ser otro Facundo, otra Johana Ramallo desaparecido por la Policía. Eran tres nenes en la plaza tomando sol, no estaban haciendo nada”, sentenció añadiendo que “no puede ser que un papá no pueda dejar a su hijo después de cinco meses de encierro que esté en una plaza porque la policía lo maltrata”.