Las integrantes de la Asociación Civil Dragones Rosas, Cristina Ferrari, Mabel Madera y Soledad Matamala, visitaron los estudios de FM Berisso Ciudad para repasar un año de intensa actividad, marcado por la participación en competencias, charlas de prevención y acompañamiento a mujeres que transitan o transitaron el cáncer de mama.
Sobre el balance del 2024, coincidieron en que fue un año muy positivo. “El balance es bueno, porque hemos tenido bastante participación en distintos eventos tratando de concientizar, que es uno de nuestros objetivos. Hemos hecho mucho este año participando en eventos de concientización y también remando en distintas competencias”, señaló Ferrari.
A lo largo del año, fueron convocadas por radios, canales de televisión y distintas organizaciones. “Nos llaman mucho más que antes. Nos conocen cada vez más y nos tienen en cuenta”, subrayaron.
En cada charla apuntan a un mensaje clave: la detección temprana salva vidas. “La mamografía duele un poco, sí, pero es una vez por año y permite un 95% de sobrevida”, explicaron. También remarcaron que el cáncer de mama no es exclusivo de mujeres. “El hombre también puede tener cáncer de mama. De los 22 mil casos registrados este año en Argentina, el 1% corresponde a hombres”, agregaron.
“Habitualmente hablamos de la necesidad de la detección temprana. Cada una tiene su historia y se cuenta solo si sirve para ayudar a otra mujer”, remarcaron las integrantes de la Asociación Civil Dragones Rosas.
Cada una encontró en Dragones Rosas un refugio y un motor. En tal sentido, Cristina Ferrari recordó que llegó gracias a una compañera del taller de pintura. “Me convocó porque sabía que estaba caída después de la operación. Y tenía razón, el día que me subí a un bote dragón, nunca más me bajé. Después de dos años en el grupo, el deporte me ayudó muchísimo, no solo físicamente, también anímicamente y en la salud mental”, expresó.
Soledad Matamala también contó su experiencia. “Para mí fue un cambio rotundo. Al principio fue acompañamiento, pero después me metí de lleno en el deporte. Me gusta mucho y es parte de mi vida”, describió.
Mabel Madera, con seis años en la agrupación, hoy es la integrante más antigua y su testimonio resume la fuerza del grupo. “Le tenía pánico al agua y tampoco sabía nadar. Hoy estoy entrenando para el mundial, el grupo de dragones rosas me ayudó muchísimo”, agregó.
La simbología del dragón está en el corazón del grupo: fuerza, energía y espiritualidad. Pero también hay un componente físico esencial. El bote de dragón, con capacidad para 20 palistas, un timonel y un drummer que marca el ritmo, permite un tipo de entrenamiento que beneficia directamente a las mujeres operadas. “La palada sincrónica y repetitiva genera un drenaje linfático natural que mejora el linfedema”, explicaron.
Este año participaron en eventos en Chile y Olavarría, junto a equipos de toda Latinoamérica. Pero el desafío mayor está en el horizonte, el Mundial de Mujeres Sobrevivientes de Cáncer de Mama, en Francia, en agosto de 2026. Cuatro integrantes de Dragones Rosas, entre ellas dos berissenses, fueron seleccionadas para representar al país: Mabel Madera y Soledad Matamala.
Por último, las tres integrantes de Dragones Rosas se convirtió en un pilar de sus vidas. “Es un lugar fundamental, un sitio donde hago algo que me encanta y comparto con gente maravillosa”, afirmó Cristina Ferrari. En tanto Soledad Matamala dijo que “fue el inicio de algo que nunca pensé que podía gustarme tanto. Cambió mi vida”, añadió Finalmente Mabel Madera expuso el significado de compartir Dragones Rosas. “Para mí es un complemento hermoso: familia, deporte, compañeras, actividades y risas. Es todo”, resumió.