Tras las dudas generadas por decenas de vecinos que recibieron nuevas tasas municipales, BerissoCiudad dialogó con uno de ellos a fin de visibilizar la problemática que, lejos de traer calma, asienta el descontento de los posibles deudores.

En este sentido, Marcelo comentó: “todo esto nos ha tomado de sorpresa, porque en este contexto de pandemia en vez de ayudar a la gente están buscando impuestos nuevos para que las arcas se sigan engrandeciendo, mientras que los servicios que brindan dejan mucho que desear”.

“Ahora, a quienes tenemos embarcaciones nos quieren cobrar una Tasa de servicios ambientales en cursos de agua; algo totalmente irrisorio", señaló, "cuando nosotros ya estamos pagando por los elementos de seguridad, seguros náuticos, guarderías, el servicio de bajada, matrículas de Prefectura, chalecos, entre otros, que seguimos bancando con nuestro lomo y laburo”.

En una embarcación de 5, 20 metros, el costo dicha boleta ronda los 14 mil pesos anuales, “lo cual es una locura, porque excede lo que estamos abonando en ARBA. Todo esto sólo por apoyar la barca en el agua”.

Amén de ello, el vecino recordó que recién a fines de octubre de 2020 se liberó parte de la navegación para retomar sus actividades habituales, “porque entendieron que estando al aire libre la posibilidad de contagios es casi nula”. Entonces, más allá de la suba de contagios, “esperamos que esto no se vuelva a cerrar”.

Por otra parte, compartió lo que se habló en la reunión entre los propietarios de las embarcaciones quienes no dudaban en colaborar con el Municipio, “siempre y cuando el valor sea menor; pero esta es una imposición de un monto muy elevado". Además, "la boleta nos llegó cinco días antes del vencimiento que es el 20 de mayo”.

“Nosotros no somos gente de dinero, lo que tenemos es parte del esfuerzo de toda la vida”, recalcó, dejando en claro que “nadie va a saldar la tasa de servicios ambientales en cursos de agua”.