Se dilata el conflicto

Grupo Delsud analiza el rescate de Acerías Berisso

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En las últimas horas, Grupo Delsud, representada por Francisco Vila Basualdo, firmó una carta de intención con los representantes de Acerías Berisso SA, encabezados por Nicolás Demetrio Didiuk, para avanzar en la compra total del paquete accionario de la empresa.

El acuerdo, suscripto el 31 de octubre de 2025, establece las bases y condiciones para una futura negociación que podría significar el rescate y reactivación de la fábrica, actualmente paralizada y en conflicto con sus empleados.

Según el documento, la operación incluiría la adquisición de todos los bienes muebles e inmuebles, activos y pasivos de Acerías Berisso. El comprador se compromete a realizar una auditoría integral (due diligence) en los ámbitos jurídico, contable, comercial y fabril durante los próximos treinta días hábiles, con posibilidad de prórroga.

Además, se acordó una cláusula de exclusividad que impide a los actuales dueños negociar con terceros durante el proceso, y otra de confidencialidad, que protege la información intercambiada entre las partes. Si bien la carta no tiene carácter vinculante en términos de compraventa, sí implica una voluntad formal de avanzar hacia el acuerdo definitivo, siempre que los resultados de la auditoría sean satisfactorios.

La negociación se da en un contexto de grave crisis laboral dentro de Acerías Berisso, que recientemente cerró sus puertas sin previo aviso, dejando a 52 familias en la incertidumbre.

En diálogo con REALPOLITIK FM, el delegado de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM), Carlos Lazarte, explicó que “nos encontramos con la fábrica cerrada, sin comunicación y sin definición sobre nuestra situación laboral. Somos cincuenta y dos familias, cuarenta y cinco de nuestro sindicato, y nos están enviando telegramas de despido con causas inventadas”.

El representante gremial denunció retrasos en los pagos de hasta tres quincenas, y apuntó contra los dueños de la empresa: “Antes de que llegara la nueva conducción producíamos entre 40 y 60 toneladas por mes con el mismo personal. Hoy la producción depende de los problemas internos de los socios de la empresa”.

La situación se agravó cuando los trabajadores intentaron ingresar a la planta para exigir claridad sobre su situación. “Nos amenazaron con desalojarnos con la fuerza pública, llevaron camiones para vaciar la empresa mientras estábamos en una audiencia virtual y agredieron a familiares de los trabajadores”, relató Lazarte.

La posible llegada del Grupo Delsud genera expectativa entre los empleados, que esperan una solución definitiva al conflicto. “Queremos trabajar, que nos aclaren nuestra situación y que nos paguen lo que nos deben. Es lo mínimo que esperamos para poder seguir adelante”, cerró el delegado.

De concretarse la operación, Delsud asumiría no solo la gestión de la histórica planta metalúrgica, sino también la reestructuración de su deuda y la reactivación productiva en un punto clave del cordón industrial de la región capital bonaerense.

 

Fuente: www.REALPOLITIK.com.ar

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