En el marco de una recorrida en vivo por la Avenida Montevideo, realizada a través de Facebook de BerissoCiudad, dialogamos con Daniel, taxista de la ciudad, quien brindó un crudo balance sobre la situación del sector en este cierre de año.
“Se está trabajando un poquito porque es mediados de diciembre, la gente sale a hacer compras y eso mueve algo, pero está jodido”, expresó el trabajador, al describir un contexto marcado por la competencia de las aplicaciones de transporte y la necesidad de extender las jornadas laborales para poder sostener el ingreso diario.
Según relató, el avance de las apps sigue siendo una de las principales problemáticas para los taxistas locales. “Con el tema de las aplicaciones vamos a tener que remar. Uno vive de esto y lamentablemente hay que meterle horas para poder sobrevivir”, señaló, remarcando el esfuerzo extra que hoy exige la actividad.
Daniel también se refirió a la elección de muchos vecinos de optar por aplicaciones, entendiendo la difícil situación económica general. “Uno entiende que la gente cuida el peso y tiene que estirar el sueldo todo el mes”, reconoció. Sin embargo, advirtió sobre los riesgos que implican estos servicios no habilitados en Berisso.
“Las aplicaciones no cumplen con los requisitos que cumplimos nosotros: no tienen seguro para pasajeros, no tienen registro para transporte de personas y hay muchas cosas más”, explicó, subrayando la falta de controles y garantías para quienes viajan.
Pese a este escenario, el taxista destacó que aún existe un vínculo de confianza con parte de la comunidad. “Hay gente que nos sigue eligiendo porque nos conocemos todos. Yo prefiero tomar un taxi porque sé con quién viajo. En una aplicación no sabés de dónde viene el chofer ni qué puede pasar”, afirmó.
La recorrida reflejó una realidad que atraviesa a muchos trabajadores del volante en Berisso, quienes enfrentan un contexto complejo, con menor demanda, competencia desleal y largas jornadas como única alternativa para sostener el día a día.