ENSENADA, Febrero 15.-(BerissoCiudad.com.ar) El detenido de 26 años que en la madrugada del viernes escapó de la comisaría de Punta Lara sigue prófugo, mientras continúan los operativos para encontrarlo y crece el malestar entre los hombres de la fuerza de toda la Provincia, por un problema que se complica a diario: la superpoblación en los calabozos de las seccionales.

El pibe que se esfumó de la seccional Segunda de Ensenada lo hizo sacando provecho del descuido de los 5 policías que estaban de guardia y de un cuerpo lo suficientemente esmirriado como para colarse por un pasaplatos de 25 por 30 centímetros, pero también del hecho de compartir un espacio destinado a 6 personas, con 12 más.

No es la única dependencia de la región (ni de la Provincia) que está hacinada y una fuga no es la única consecuencia posible. La semana anterior hubo incidentes en la Tercera de Los Hornos, donde algunos detenidos incendiaron papeles (se cree que para pedir traslados) y debieron intervenir los bomberos, que afortunadamente están al lado.

De este modo, la falta de vacantes en el Servicio Penitenciario bonaerense hace que la contracara inevitable de la efectividad policial en la represión del delito sea el fenómeno de dependencias que deben destinar parte de su personal al cuidado de muchos más presos de los que pueden alojar. Y en la Jefatura Departamental La Plata hay, hoy por hoy, récord de detenidos.

Entre todas las comisarías no deberían albergar más que 184 internos y hasta el último jueves había 337, es decir que la capacidad está desbordada en un 183,15%. Y si lo ideal es que ninguno permanezca en un calabozo (sin espacio de recreación, talleres, ni escuela) durante más de 15 días, la realidad es que algunos de esos presos llevan ahí algo más de un año.

Las más desbordadas de La Plata son las comisarías Primera, con capacidad para 6, aloja a 32 (533% de superpoblación); la Decimotercera de Gonnet, con cupo para 3 y con 9 presos (300%); la Segunda, con 9 hombres, cuando debería haber 4 (225%); la Tercera, con 25 internos, aunque los calabozos alcancen para 12 (208%); la Decimocuarta de Melchor Romero, con capacidad para 12 y con 23 detenidos (191,6%); la Decimosegunda de Villa Elisa, aloja a 15 hombres, en lugar de los 8 ideales (187%); la Octava, con capacidad para 16 y con 28 detenidos (175%); y la de Ringuelet, que puede albergar a 8 internos, pero tiene 14 (175%).

En el Destacamento Arana -destinado a la detención de integrantes de fuerzas de Seguridad- hay 10 presos, y tiene lugar para 6 (166%). En la comisaría de la Mujer hay 23 detenidas y la capacidad es de 15 (153, 33%).

En Berisso, la cosa no está mejor. La Primera tiene 34 reclusos y los calabozos no dan más que para 10 (340%) y en la Segunda hay 16, contra los 6 ideales (266%). En la Segunda de Ensenada ya sabemos qué pasó; mientras que la Primera de esa ciudad tiene 15 internos, cuando debería haber 4 (375%); y en la Tercera hay 20, cuando debería haber 6 (333%). El resto de las seccionales se encuentran al filo del colapso y hay otras que no están habilitadas para alojar aprehendidos, como la Quinta o la Novena de La Plata.(Fuente: Diario HOY)