Con motivo de continuar con la difusión de su proyecto, vecinos, referentes y diversas instituciones locales brindaron detalles sobre la iniciativa que busca el reconocimiento histórico y la puesta en valor de la Toma de Agua.

A pesar de que la idea viene de años, el trabajo tomó forma durante el último mes, respondiendo a la pregunta “¿Por qué no hacer de este espacio un ámbito recreativo, donde se valorice nuestra historia como ciudad?”.

Si bien allí funciona el Museo 1871, en la planta alta, “hace más de treinta años que el edificio carece de mantenimiento”, a pesar de que la planta baja está destinada a un uso administrativo de ABSA.

Entonces, para revertir el deterioro del mismo, los voluntarios plantearon tareas conjuntas “para llegar al reconocimiento histórico”.

Algo que se tratará en los próximos días con las autoridades de la empresa mencionada y del Municipio local “para el uso público de este lugar”.

Además, quieren declararlo patrimonio histórico y arquitectónico de la ciudad “para mantener su origen colonial, con materiales nobles, único en Berisso”, lo cual fue más que aceptado por cientos de vecinos.

“Esto nos da mucha alegría porque se dan un sentido de pertenencia, gracias al apoyo de las escuelas, ONGs, el cuartel de Bomberos, la Cámara de Comercio, empresas de la región, entidades y medios”, destacaron.

Así con el paso del tiempo y la reapertura de las actividades, se irán sumando otras propuestas destinadas a la gente.

Por último, cabe destacar que todos aquellos que se fueron sumando al proyecto Toma de Agua lo hicieron sin distinción política, y se acotaron simplemente a aportar ideas o sugerencias en beneficio de la comunidad.