El presidente del Centro de Almaceneros de Berisso, Ricardo Cuevas, habló sobre la complicada realidad que atraviesan los comercios de barrio en medio de la caída del consumo y el aumento de los costos. Desde su local ubicado en 15 y 157, aseguró que la situación es cada vez más difícil para quienes sostienen su negocio con todo en regla.

“Para el día a día del almacenero es muy difícil. Nosotros que tenemos todo en regla tenemos muchos gastos y el consumo es muy poco”, explicó Cuevas, quien además señaló que los hábitos de compra cambiaron notablemente: “Hoy el vecino o vecina que venía a comprar sus cosas elige ir a otros comercios más grandes o busca segunda hasta terceras marcas para sobrevivir”.

La situación también afecta la llegada de productos y en ese sentido el referente sectorial consignó que “los distribuidores vienen cada vez menos. En el caso mío, hay una empresa láctea que admite que sale muy caro tener una logística para los almacenes de barrio”.

Pese a las dificultades, Cuevas destacó la importancia de mantener el vínculo con el cliente y la responsabilidad comercial: “El cliente, que es el rey, trata de no echar culpas al almacenero. Queda en nosotros tener la muñeca necesaria para tener todo al día y que los precios estén acordes”.

Por último, describió cómo el poder adquisitivo de las familias se redujo drásticamente: “Ya existen clientes que vienen con la tarjeta de un banco y hacen compras por cinco mil pesos hasta en cuatro cuotas. El consumo bajó mucho; hoy la gente prioriza lo básico y no se da gustos en sí. Es por esto que nosotros tenemos que estar atentos”.