A raíz de las declaraciones del subsecretario de Tierra, Vivienda y Hábitat municipal, Gabriel Marotte, los preadjudicados de Barrio ProCreAr en Santa Teresita compartieron su postura diciendo que todavía están en una espera que lleva más de siete años y desean que esta vez tenga su fin.

“En todas las oportunidades, y en diálogo con las distintas gestiones, siempre se obvió la parte política, porque este un plan para acceder a una casa propia, ya que no hay otro medio posible para obtenerla”, explicaron.

En este sentido, uno de los referentes recalcó que “lo que se pagó fue con plata de los vecinos, para toda la infraestructura que se necesita, ya sea de cloaca, luz y demás. Nosotros tenemos que devolver ese dinero invertido, así que no nos están regalando nada”.

Una inversión que se vio opacada en 2018 cuando se abandonó la obra y se rompieron los alambres perimetrales, luminarias y caños que pertenecen al agua potable; además del ingreso de animales en una zona que es privada.

Debido a ello, se pidió que el Municipio se haga cargo de dicha situación, al menos en lo que respecta a seguridad, poniendo a disposición un sereno; “algo que también le solicitamos al responsable de la Zona II”.

En base a la culminación de la obra mencionaron que aun falta la conexión al caño maestro de la 66 y la colocación de tableros eléctricos para las bombas que van a ayudar a la salida los líquidos cloacales.

Amén de ello, “estamos a la espera de una respuesta del Banco para saber si estamos aptos para recibir el crédito”, indicaron, dejando en claro que ellos sólo quieren su casa propia y que están pidiendo algo “que vamos a pagar durante 30 años, o sea de por vida”.